Hay personas que aseguran que el destino o la pre-destinación no existe y defienden la tesis de que el ser humano tiene «el secreto» para evadirla y optar a todo lo que desee o tal vez al revés, para evitar algo que no desea, apenas enfocando su intención.
En este artículo, te muestro un potencial muy especial que solo algunas personas experimentarán debido a sus datos natales.
¿Se pueden evitar situaciones negativas solo con el poder de la intención?
No niego que enfocar la intención en lo que se ambiciona, pudiera incrementar las posibilidades de materializar una aspiración, pero…
En mi opinión, el enfoque de la intención solo funciona y se potencia «en el momento oportuno», es decir, cuando están dadas las condiciones para que la intención se alinee con un instante favorable.
Al contrario, enfocar la intención (al desear alcanzar o evitar algo) fuera de esa alineación, solo hará que se desperdicie tiempo y energía en la consecución de un resultado que tenderá a ser parcial.
Esto último se parece a pretender hacer germinar una semilla de una planta tropical en un entorno invernal, donde las condiciones ambientales serían las opuestas a las que la especie requiere para nacer y prosperar.
Es más, ponerle intención a algo no siempre garantiza que se logre concretar o alcanzar.
De hecho, te insto a recordar cuanta energía, intención y tiempo le has dedicado a un sueño, deseo o anhelo… que nunca se realizó.
¿Sabes por qué?
Porque solo es posible alcanzar la realización de algo, si aquello se alinea con tu pre-destinación o con el programa que rige tu vida (tu destino).
Un ejemplo de pre-destinación
Es conveniente señalar que la pre-destinación es un tema complejo que suelo explicar e ilustrar en detalle a los alumnos de los Cursos que imparto sobre Numerología Transpersonal.

Sin embargo, confieso que usé este enfoque como preámbulo para comentar – a modo orientativo – un aspecto muy específico de la pre-destinación que parece estar afectando a un grupo muy particular de personas durante el año 2018 y que se repetirá en el año 2027.
Las personas afectadas por este aspecto de predestinación, cuyos efectos describiré a seguir, son aquellas que nacieron durante los días 9, 18 o 27 de un mes de septiembre de cualquier año.
Esta afectación se incrementará si estas personas están transitando por las siguientes edades:
Entre los 13 y los 15 años
Entre los 22 y los 24 años
Entre los 31 y los 33 años
Entre los 40 y los 42 años
Entre los 49 y los 51 años
Entre los 58 y los 60 años
Entre los 67 y los 69 años
Entre los 76 y los 78 años
Las tendencias de esta singular pre-destinación son las siguientes:
Durante el año 2018 – desde el 1º de enero al 31 de diciembre – los nacidos en esos días de septiembre sentirán / pasarán por una fuerte inclinación a experimentar crisis emocionales derivadas de despedidas o separaciones de personas vinculadas a ellos (simples afectos, amistades, asociados, familiares o parejas consolidadas), cuya relación ha sido idealizada o se han generado altas expectativas no acordes con la realidad.
Los meses de este año 2018 que podrían incrementar estos efectos son marzo, mayo, junio, septiembre y diciembre.
Las personas más afectadas por estas tendencias son aquellas que están enfrentando una crisis matrimonial o de pareja, donde una de las partes desea separarse o ambos están contemplando una separación definitiva.
En realidad, la tendencia imperante es esa: una separación con tendencias definitivas.
Las consecuencias colaterales que esta pre-destinación genera son: indecisión, inseguridad, fuerte dualidad, confusión emocional, tristeza, depresión y crisis existenciales.
Si naciste en esos días del mes de septiembre y estás transitando entre esas edades, te doy la bienvenida al mundo de la predestinación, donde nada ocurre por azar y todo lo que sucede está programado como una inevitable tendencia personal, producto de anteriores procesos de vida.
- ¿Eres tú o es el otro?
- ¿Cómo saber si estás tomando la decisión correcta o la corriente de la vida te arrastra?
- ¿El desenlace es inevitable?
Si así fuera, es recomendable comprender tu proceso, aceptarlo, rendirse ante lo inevitable y enfrentarlo como una de las más importantes pruebas que la vida suele poner de tanto en tanto.
No estoy afirmando que solo las personas nacidas en esas fechas son las únicas que el año 2018 están experimentando inestabilidad emocional.
Solo deseo alertar a los casos citados, pues los potenciales que describí son inusuales, extremos y tienden a perdurar todo el año.
Si te identificas con esta información o conoces casos que la validen, deja tus comentarios para beneficio de los lectores.
Mario Liani
Foto portada por Wallpaperflare.com